viernes, 27 de mayo de 2011

Cita



Y dicen que pienso en lo escasamente saludable que a la larga fue publicar libros y haberlo hecho en gran parte para tener cierta fama y luego poder administrarla como un buen burgués y acabar diciendo banalidades en periódicos y revistas, incapaz de ser el dueño de la más pequeña partícula de terreno de índole privado, personal. Escribir para esto.

ENRIQUE VILA-MATAS

© de la fotografía the euskadi 11 (fuente flickr). Publicado bajo una licencia Creative Commons

14 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo. Escribir para esto. Si es que escribir no es saludable, para empezar es adictivo, solitario, indiscreto, improductivo... y encima corres el riesgo de terminar diciendo-escribiendo chorradas en cualquier revista. Bueno os dejo que tengo que preparar el artículo de la revista.
    AAAAAAAAAAAAAAAGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG

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  2. Bueno, Ángel, al menos, tanto la literatura como los artículos te permiten vivir como Dios, no te quejes :P

    De todos modos, que me digan a mí cómo hacer para vivir de la literatura como un burgués.

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  3. Vila-Matas es el mejor. Claro que yo no soy nada objetiva con él, una de mis grandes filias, un maestro, un genio de la literatura, sin lugar a duda. (acabo de recogerme la baba...)

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  4. Lo de ser objetivos (en el sentido de la RAE, de ser desinteresado y desapasionado) es para otros. Nosotros, desde el momento en que seguimos a un determinado autor, dejamos de serlo, porque nos retratamos al analizar y debatir sus pensamientos y, muchas veces, hacerlos nuestros. Ahora bien, lo de la baba es otra cosa... :)))

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  5. Bueno, supongo que el placer de conseguir que te lean... porque alguien publica tus libros, tiene la contrapartida de la parte fea de la cuestión. Sí. Pero seguro que si se hubiera «jartao» de escribir y nadie la hubiera publicado nunca, no viviría de lo que más le gusta ni administraría su fama como un burgués y, entonces se estaría quejando de la perra vida que no le da la oportunidad de demostrar la valía de sus escritos... ¿no?
    Cuando uno tiene la enorme ventaja de poder hacer en esta puñetera vida lo que más le gusta y vivir muy bien económicamente de ello, creo que tiene poco «derecho» -mi obtusa mente no encuentra otra palabra, perdón- a quejarse. Vivir creando es lo más grande de esta vida, un regalo de los dioses. Y, además, muchos creadores han sido reacios a quemarse en diversas ferias de vanidades y lo han logrado, aunque hayan pasado a la historia como «rarunos» e, incluso como espíritus desagradables.
    Esta es mi opinión y reconozco, para vuestro estupor, que nunca he leído nada de este escritor y que esta cita, como todas, está fuera del contexto que les resta radicalidad.
    Besos miles

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  6. Seguro que el sacar las cosas de su contexto original les confiere una intención que, a lo mejor, no tenía el autor, pero sirve para convertirlas en elementos de debate, de intercambio de ideas, en ejercicio de la inteligencia. Por otro lado, al menos en este blog, no se pide un currículum de lecturas obligatorias; sólo es un lugar de encuentro de un puñado de amigos que no se conocen pero que, día a día, hablan, discuten, aportan...

    Beso, Lola.

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  7. Creo que he debido decir algo que no debía o que he molestado de alguna forma. Si es así, te pido disculpas con todo mi corazón, Javier, y si es necesario que retire mi respuesta así lo haré. No quería decir nada molesto.
    Besos miles

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  8. En absoluto, Lola; no sé qué te hace pensar eso. Además, solo faltaba que, al menos en este blog, no pudiéramos decir lo que pensamos, siendo pocos y bien avenidos, como somos. Si tengo habilitado el control de comentarios es para que nadie pueda hacer comentarios homófobos, racistas o de cualquier otra forma de desprecio al género humano, al menos de forma gratuita, y estoy por quitarlo, para que la libertad a la hora de hablar aquí sea absoluta, aunque lo cierto es que nunca he tenido que censurar ninguno de ellos. De todos modos, no me he sentido molesto en ningún momento por tus palabras (ni siquiera releyendo con lupa hallo motivo para ello) y, si soy yo quien te ha molestado para que repliques así, te ruego que me lo digas, puesto que tu presencia aquí es muy valiosa para mí, así como tu amistad, y me gustaría encontrar el tono exacto a la hora de debatir, comentar, discutir, pasarnos la mano por el lomo... lo que se tercie en cada momento, sin que mis visitantes y amigos se sientan incómodos por mis palabras. En fin, que no sé qué más decirte para que te sientas mejor... que no pasa ná, chiquilla.

    Beso.

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  9. Entonces, Javier, tengo que ser yo, que no estoy muy fina y últimamente veo que todo lo que sale de mí es ácido y criticón. Quizá el que no me rebatieras lo que afirmaba de mi parecer de las palabras de este autor me ha hecho pensar... por supuesto de forma errada, que quizá no era bien recibido.
    Te pido disculpas a ti y todos tus seguidores. En este blog no recibo otra cosa que cosas buenas, está claro. Siento mi salida... Besos miles, Javier y muchas gracias por ser como eres: genial.

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  10. No hay de qué disculparse, Lola; todos tenemos momentos de bajón o, de vez en cuando, interpretamos las cosas de forma errónea. Si lo que te llevó a pensar que me habías molestado de alguna manera fue el que no rebatiera tus palabras —no siempre rebato, hay veces en que estoy de acuerdo—, la próxima vez te rebatiré hasta la extenuación, aunque opine lo mismo que tú, con tal de que no te sientas mal ni abandones nunca este blog :))))))

    De todos modos, en este caso, el contexto no le resta radicalidad a la cita, ya que toda la novela es bastante radical. He enlazado una reseña en la entrada, donde pone "Doctor Passavento", bajo el nombre del autor, para que te puedas hacer una idea.

    Espero que esto te haga sentir mejor.

    Beso.

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  11. No debería yo meterme en camisas de once varas, pero como tampoco soy de callarme y como creo, que digo creo, sé que estoy entre amigos, diré que: sigo un montón de blogs y casi nunca o nunca comento, en cambio en este me siento como pez en el agua, por la indudable maestría de Javier eligiendo citas, por su s magníficos escritos y por sus sabios comentarios, pero sin vosotros, amigos-as habituales, esto se quedaría un poco cojo, así que por favor, no se me borre nadie ahora que ha regresado e señor Valls. Lola tus opiniones son muy apreciadas y esperadas, al menos por mi, así pues reibe mi abrazo. No os pongais celosones, venga otro para Javier y otro para Anita.

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  12. Lola, ¡ahí queda eso!

    Gracias por el capote, Ángel, amigo.

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